Para cualquier actividad que realicemos al aire libre con un clima frío, debemos elegir una vestimenta que no solo mantenga nuestro cuerpo caliente, si no también seco, evitando tanto la condensación producida por nuestro sudor como así también evitar que nos moje la lluvia o la nieve.
La manera mas eficiente de lograr esto es usar la técnica de las tres capas, en la que con solamente la combinación de tres prendas de ropa crearemos un pequeño microclima para proteger nuestro cuerpo de las inclemencias meteorológicas y de nuestro sudor.
Primera capa, también conocida como segunda piel:
Es la capa que se encuentra en contacto con la piel. Su principal función es absorver el sudor de la piel, evitando la sensación de humedad y que nuestro cuerpo se enfríe.
En esta capa debemos evitar la ropa de algodón que se humedecen con facilidad (pueden absorber hasta cuatro veces su peso en agua) y que tardan mucho tiempo en secarse.
Para ello se utilizan materiales no absorbentes compuestos por fibras sintéticas (como el poliester, polipropileno, etc. que dejan pasar todo el sudor producido por nuestro cuerpo.
Se recomiendan que las prendas nos queden lo más ajustadas posibles al cuerpo pero sin llegar a apretarnos, para evitar que penetre el viento entre ellas y nuestro cuerpo (nos evitaría el enfriamiento por convección), y permitirnos realizar movimientos sin dificultad.
Requisitos que debe cumplir la primera capa:
- Evacuar el sudor y la humedad
- Retener el calor con ropa térmica
- Ser respirable
- tener tacto agradable y ser antialergica
- Fácil de lavar
Segunda capa o capa de abrigo:
Nos la pondríamos encima de la primera capa, su función es la de atrapar y retener el aire caliente para evitar las pérdidas de calor, retener el calor generado por el cuerpo e impedir el enfriamiento favoreciendo la evacuación de la humedad generada por el sudor.
Esta capa no debe apretar como la primera capa, pero debe estar ajustada al cuerpo, ya que en caso contrario podríamos perder el aire caliente con los movimientos, en caso de que la prenda quede muy holgada.
La idea es utilizar materiales aislantes que aun estando mojados consigan mantener su propiedades aislantes y transpirables intactas. Para ello podemos encontrar en el mercado gran variedad de fibras sintéticas (poliester) y naturales (lana) que realicen esta función. Al igual que en la capa anterior, las fibras sintéticas tienen a su favor que son menos absorbentes facilitando una mejor transpiración, además de secar más rápidamente. Las fibras naturales sólo tienen como ventaja que retienen más el calor, así que se suele mezclar con fibras sintéticas para mejorar sus propiedades.
Polartec se ha convertido en la fibra sintética con más renombre dentro del mercado, siendo utilizada por muchas de las grandes marcas de montaña para fabricar sus ropas. Podemos encontrar muchos tipos de fibra dentro de esta marca, pero una clasificación que normalmente observaremos en la prendas fabricadas con Polartec es el grosor de la fibra en gr/cm2, encontrándonos 100, 200 o 300 gr/cm2 y que elegiremos según la temperatura a la que vayamos a realizar la actividad.
Tercera capa, capa de protección exterior:Esta capa debe ser de un material que cumpla las funciones de ser impermeables y a la vez transpirables, una de las más conocidas es gore-tex, que ha desarrollado multitud de membranas con varios laminados. Debemos buscar una protección que por un lado sea impermeable y cortaviento combinando todo ello con una buena transpiración que nos permita eliminar la humedad sobrante, y evitar que nos empapemos. Esto permitirá que la nieve, la lluvia y el viento no penetren en el tejido y al mismo tiempo permitir la liberación del sudor.
Reiteramos la importancia de que esta última capa sea lo más transpirable posible, ya que como hemos comentado al principio, nuestro propio sudor puede empapar nuestra ropa causándonos un gran malestar e incluso una hipotermia al enfriarnos considerablemente.
Además esta capa debe de ser resistente a rozaduras, abrasión y desgarros, ya que al ser la más exterior estará en contacto con nuestro material como mochila, piolets, cuerdas, etc; así como a las rocas y ramas del paraje donde estemos.
Resumiendo:
La idea que se persigue es poseer tres prendas de ropa únicamente, cada una con una función muy bien definida, pudiendo combinarlas según las circunstancias meteorológicas en las que nos encontremos. Por ejemplo, en un día soleado utilizaríamos solamente la primera capa. Si comenzara a refrescar pero no corriera viento nos abrigaríamos con la segunda capa. Si por el contrario comienza a llover pero la temperatura es agradable sólo tendríamos que colocarnos encima la tercera capa, dejando la segunda en la mochila. Si las condiciones se vuelven muy adversas, utilizaríamos las 3 capas al mismo tiempo. Sabiendo que en las capas primera y segunda podemos encontrar prendas de distintos grosores, y que debemos elegir según las temperaturas y el tipo de actividad que realicemos.Esto valdría tanto para la parte superior del cuerpo como para las piernas. Para las piernas utilizaríamos unas mallas junto con unos pantalones de trekkin si no esperamos lluvia o nieve, aunque podríamos colocarnos encima unos pantalones finos con membrana impermeable que podríamos llevar en la mochila. También podríamos combinar las mallas directamente con unos pantalones con membrana impermeable algo más gruesos, evitando en este caso unos pantalones de trekkin adicionales.En el caso de los guantes también podemos combinar unos guantes térmicos más finos, que nos permitirán manejar objetos con más precisión, con unos guantes polares o manoplas cubriéndolos, en el caso de mucho más frío, con los que nuestra manejabilidad de manos puede resultar limitada, sobretodo con la manopla, donde se persigue tener los dedos unidos entre sí para que se den calor los unos a los otros, y completándolo con unos guantes con membrana impermeable para evitar la lluvia o la nieve.
Excelente informe